Junto con el éxito de las confluencias, la segunda idea que más se repite en todos los análisis de las pasadas elecciones municipales y autonómicas es el papel de las mujeres, el protagonismo y liderazgo de grandes vencedoras como Manuela y Ada.
Los medios suelen fijarse siempre en figuras singulares, pero es de justicia reconocer el papel silencioso de muchas mujeres en los procesos de consenso. Las candidaturas ciudadanas articuladas de manera horizontal, transparente, en definitiva, con nuevos métodos de participación, han servido para que muchas mujeres dieran el paso hacia la política desde el activismo social.
Esto ya es una victoria, pero debe suponer un nuevo tiempo para la política que esperamos más participativa, más amable, más valiente… en definitiva, ¡repleta de mujeres!
Desde la RQM nuestra enhorabuena para todas las concejalas recién elegidas y hoy, 13 de junio, celebramos especialmente con optimista satisfacción. Pero también alegría compartida con todas esas candidatas y otras mujeres que han sido claves en los procesos de negociación de esta nueva construcción política, con independencia del resultado.
Y nuestro agradecimiento por hacer posible este empoderamiento colectivo, por trabajar incansables por una mejor democracia.
Pero no es suficiente, todo este aprendizaje y creciente participación debe traducirse en un mayor peso político de las mujeres.
Ante el nuevo ciclo político que se abre es fundamental oir más voces de mujeres en el escenario público. Voces fuertes que sean escuchadas, consideradas y respetadas por su criterio y su peso político. Necesitamos mujeres que hablen y creen discurso en economía, energía, residuos, sistema electoral, infraestructuras, fiscalidad… Nuestra contribución y visión tiene que ir más allá de las políticas de igualdad, de cuidados y de derechos sociales.
Aún nos quedan ámbitos que ganar y, a veces ,depende sólo de nosotras.
@redequomujeres