El día de la mujer rural, es uno de esos días que se amontonan los recuerdos.
Todas las mujeres de mi pasado fueron mujeres rurales. Todas ellas nos enseñaron el sacrificio de vivir de lo que daba la tierra por eso, la importancia de valorarla y cuidarla. Las mujeres rurales saben bien lo que son los cuidados. Siempre pendientes de los hijos, de los padres, de las madres, de quienes las necesitan. Del cuidado de los animales y de la naturaleza.
Las mujeres rurales eran y son los pilares de la comunidad. Del campo.
Sin mujeres los pueblos desaparecen, y con ello una forma de vida.
Es necesario mirarse en ellas para aprender. Es necesario conocer la manera de relacionarse entre ellas y con la naturaleza para no perder las raíces.
Las mujeres hoy, necesitamos más que nunca aprender del pasado pero con la visibilidad del presente y la esperanza de un futuro mucho más igual. Necesitamos visibilizar el trabajo de las mujeres rurales. Dignificar los cuidados.
Hay que volver a la vida natural, a las semillas, al pan, a las fuentes que nos dan la vida. Para eso, hay que valorar el trabajo de la mujer rural.
Hay que volver a conectar con la naturaleza respetándola y aprendiendo de ella.
Nuestras mujeres son la fuerza del pasado que nos empujan al futuro de las oportunidades y de la equidad.
Hoy, es el día de las mujeres rurales, de las de ayer y de las de hoy. Ojalá lo sea de las del futuro.
¡Volver a nuestras raíces con la libertad conseguida.
Volver a la tierra con todo lo aprendido
Las mujeres de Campo. Tierra.
Las hijas. Las madres. Y Abuelas.
Sus manos. Abrazos y fuerza.
Son nuestra raíz. Hojas y savia.
El pasado, presente y futuro de nuestra tierra!
Emma Álvarez Alba RQM Asturias
